¿Qué es un proceso monitorio?
Hasta nuestra asesoría online para particulares y empresas en Madrid nos llegan cada día muchas consultas sobre reclamación de deudas de todo tipo de importes. Gracias a los procesos monitorios dentro del ámbito civil se puede conseguir una resolución rápida. Pero, ¿sabes en qué consiste?
¿Quién puede interponer un proceso monitorio?
Un proceso
monitorio puede ser impuesto por cualquier persona que quiera conseguir el
pago de una deuda, independientemente de cuál sea la cuantía. Uno de los
requisitos es que dicha deuda sea líquida, es decir, que se pueda expresar
numéricamente hablando, y que sea determinada, esto es, que se conozca su
importe con precisión. También es necesario que haya superado el plazo
requerido para su pago y que sea exigible, o sea, que el deudor se encuentre
obligado a efectuar el pago.
Además, quien
solicite este tipo de procedimiento tiene que acreditar que su relación con el
deudor esté justificada, ya sea mediante facturas, albaranes, certificaciones,
documentos o telegramas. Con ello, el solicitante tendrá que presentar un
escrito con una petición para iniciar el procedimiento. En el mismo, va a
ser necesario la asistencia de un procurador y de un abogado cuando la persona
demandada se oponga al pago o cuando no se pague de manera voluntaria deudas
que sean superiores a los 2000 euros. En este caso, se declarará un juicio de
ejecución forzosa o declarativo, según proceda.
Una vez se haya presentado la petición inicial, el deudor puede pagar de manera voluntaria la deuda, oponerse al pago o dejar transcurrir el plazo indicado sin hacer ninguna de las dos cosas. También se puede interponer una reclamación si no se está de acuerdo con el motivo de la interposición del proceso.